El Dreamland Gran Canaria afronta hoy el primer partido del playoff final de la Eurocup ante el Hapoel Tel Aviv (19.00 h) en busca de su segunda corona continental, un título que ya conquistaron en 2023 y que puede otorgarles el pasaporte a la próxima Euroliga. Sitapha Savané (Dakar, 1978), presidente de la entidad y exjugador del conjunto isleño, analiza para MARCA la trascendencia de este enfrentamiento histórico.
Pregunta. ¿Cómo está el presidente a nivel personal después de entrar en otra final europea?
Respuesta. Bueno, obviamente muy satisfecho por volver a una final europea. Es la segunda en tres años que llevó como presidente. Eso dice mucho del trabajo que se está haciendo en esta parte y ayuda mucho con el día a día.
P. ¿Ha sido un poco más complicado que la última?
R. Con el cambio de formato, desde luego es más complicado. Además, por dónde estamos situados en el mapa hay que meter el factor de los viajes y todo se nos complica todavía más. La ACB no suele parar y no te suelen mover los partidos como hacen otras ligas. Así que da aún más crédito el poder llegar hasta la final.
P. ¿Qué espera de esta nueva final?
R. Otro reto en mayúsculas, y ya lo teníamos en la semifinal. Jugamos contra el gran favorito de la competición, que se ha cargado al otro gran favorito fuera de casa. Nos conocemos bien, estuvimos en el mismo grupo y nos han dado la mayor paliza que hemos recibido estos tres años. Así que con muchísimo respeto, pero también con ambición
Es un reto en mayúsculas, jugamos contra el gran favorito de la competición y lo afrontamos con muchísimo respeto, pero también con ambición
P. ¿Ponen el ojo en ese partido de grupos como referencia?
R. Tiro de la frase del Cholo, pero que se ha dicho toda la vida. Eso de partido a partido es el único camino. Muchas veces este primer partido permite, a partir de ahí, hacer ajustes. Es lo que nos ha pasado en la semifinal, que cometimos algunos errores. El equipo ha sabido adaptarse en ese segundo partido, y sabíamos que un tercer partido era mucha presión también para el equipo rival.
P. ¿Volverán a pasar por caja los abonados?
R. No me gusta eso de pasar por caja, porque parece un extra que se impone. Realmente es algo que viene con la estructura del propio abono. Hay abonos con un precio mucho más alto porque incluyen todo y hay otros de menor precio que lo tienen separado. Hemos procurado que el precio sea bajo. Son precios entre 10 y 15 euros para los abonados en una final de Eurocup. Entendemos que es un precio muy ventajoso.
P. ¿Qué armas tiene el Gran Canaria para ganar esta final?
R.La experiencia es nuestra mejor arma. De jugadores que han ganado un título en Europa, el Granca tiene siete u ocho hora mismo en la plantilla. Los demás finalistas no tienen ninguno. Este factor de experiencia se ha visto en la semifinal con un rival que tenía el doble de presupuesto. Ahora nos medimos a un presupuesto todavía mayor. Otro factor a favor es que no tenemos presión, porque toda la presión está con el Hapoel.
La experiencia es nuestra mejor arma. Y otro factor a favor es que no tenemos presión, porque toda la presión está con el Hapoel.
P. ¿Cuál cree que será la clave del partido?
R. El factor físico. Eso es lo que puede diferenciar a los equipos. Cuando el contrario tiene más físico, tienes que contrarrestarlo con más intensidad y también con inteligencia táctica. Estas dos cosas las hemos demostrado en la semifinal y tendremos que volver a mostrarlo mejor en la final.
P. ¿Cuándo cogió las riendas del club imaginaba disputar dos finales europeas?
R. Es algo extraordinario. Cuando llego al club llevábamos cuatro temporadas sin ni siquiera disputar la Copa del Rey. Llevamos tres años en Copa del Rey, dos finales de Eurocup y luchando por estar tres años consecutivos en el playoff por el título. Ha sido un cambio de edición 180 grados a nivel de resultados y a nivel de juego. Y también en la masa social de los abonados. Realmente a todos los niveles del club estamos viviendo un buen momento y hay que disfrutarlo.
Es algo extraordinario. Llevamos tres años en Copa, dos finales de Eurocup y luchando por estar tres años seguidos en el playoff por el título. A todos los niveles estamos viviendo un buen momento y hay que disfrutarlo.
P. ¿Qué hoja de ruta se marca para seguir creciendo?
R. Tenemos una estructura sólida donde trabajan casi 25 personas en sus respectivos departamentos. Yo he tratado de poner mi sello de ir con la idea de no ser solo un club, sino de ser también una empresa. Esto nos ayudó a la hora de inculcarlo a todos los niveles y de tener mucha exigencia para trabajar siempre con objetivos, con métricas y un seguimiento claro a lo que hacemos.
P. ¿Podremos ver al Gran Canaria en Euroliga?
R. Hace dos años vivimos la situación, no tanto por el club, sino por la propia estructura de la Euroliga. Dijimos que no en su momento, pero hemos trabajado el volver a ganarnos esta posibilidad de poder dar este salto. Muchas de las cosas que comentamos en su día siguen siendo así. Aunque ahora mismo estamos en un momento de muchos cambios y rumores, sigo opinando que el modelo de la Euroliga todavía se tiene que cambiar. Desde luego para los equipos que no somos propietarios, porque la gloria deportiva tiene que ir también con un aspecto económico igual. Estamos en la final de Eurocup y seguramente terminaremos con un balance no positivo a nivel de la propia competición. Si llegamos a la final y la perdemos, el premio sería solo de 100.000 euros, que se te habrá ido en los buenos chárter que tenemos que coger ahora para ir a Bulgaria a jugar este partido, además de todos los demás costes añadidos.
Sigo opinando que el modelo de la Euroliga se tiene que cambiar. Desde luego para los equipos que no somos propietarios, porque la gloria deportiva tiene que ir también con un aspecto económico igual.
P. ¿Qué ha cambiado para que ahora sea diferente?
R. Lo principal que ha cambiado es la solidez del propio club para afrontar esto. Hablamos de Euroliga y solo pensamos en la parte de la cancha, pero hay un apoyo necesario para afrontar esta competición. Hay una parte que viene de la propiedad a nivel económico, pero no puede ser solo a este nivel. Los propios aficionados significarían una parte importante de los abonos. A día de hoy tenemos abonos más baratos que los recién ascendidos. Y eso no puede ser si quremos estar en Euroliga. Si damos este paso, todo el mundo tiene que arrimar el hombro.
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