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La cruzada de la DGT contra la velocidad en las carreteras españolas no decae... y Tráfico se carga de razones cuando suceden cosas como la que han captado los helicópteros Pegasus de la Dirección General de Tráfico, que acaban de batir un triste récord en su labor de vigilancia y sanción de los excesos de velocidad.
La DGT ha publicado el vídeo de la infracción de velocidad más grave registrada en España el pasado año, en la que un conductor a bordo de un Porsche fue cazado a 238 km/h, cuando el límite máximo de una carretera en España es de 120 km/h. Es decir, roza el doble del tope legal establecido.
Se trata del más llamativo de los más de 1.100 'grandes excesos de velocidad' que durante 2024 registraron los radares de la Direccion Generál de Tráfico en España, tanto los instalados en las calzadas, como los móviles en vehículos patrulla o lo que operan desde el aire en los helicópteros Pegasus.
El protagonista de la mayor pillada del año 2024 es un conductor de un Porsche Cayenne que no sólo rompió los límites de la A7 (en la provincia de Valencia) con mucha holgura, sino que además realizaba adelantamientos antirreglamentarios. Por esa razón, el operario de Pegasus solicitó apoyo en tierra y una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico procedió a detener al infractor.
Las otras infracciones no resultan menos llamativas: un coche circulando a 206 km/h... por una carretera convencional (con límite 90 km/h); un motorista a 185 km/h en un tramo limitado a 80, un tercero a 198 km/h en una vía también limitada a 90...
Más que una multa, un delito
Situaciones como la de este conductor sobrepasan el nivel de infracción istrativa para pasar a ser considerada un delito por el ordenamiento jurídico español. Se considera así a excesos de velocidad superiores a 80 km/h respecto al límite establecido en la vía en la que se producen si se trata de una zona interurbana. En el caso de que la infracción se cometa en vía urbana, el límite del delito es menor ya que se fija si se supera en 60 km/h el tope máximo.
Para los delitos contra la seguridad vial, lógicamente, las sanciones son mucho mayores ya que al considerarse un delito penal los infractores pueden sufrir incluso penas de prisión. Adicionalmente, y cuando se da un delito, es automática la privación del derecho a conducir vehículos en periodos que pueden oscilar entre uno y cuatro años.
