Fue otra de las buenas noticias que dejó el partido del pasado miércoles ante el Villarreal, Iago Aspas se reencontró con el gol. El capitán no marcaba desde hacía dos meses y materializó el penalti que suponía el 3-0 definitivo.
El último gol que había marcado tuvo lugar el pasado 21 de abril ante Osasuna, la semana anterior a ese partido también había marcado ante el Atlético de Madrid. En el cómputo total de la temporada suma nueve goles, lo que supone que sea el máximo goleador del equipo junto a Borja Iglesias.
Después de la lesión que sufrió en el arranque del año y tras recibir el alta médica, el céltico ha ido alternando titularidades con suplencias. En cuatro ocasiones salió de inicio y en seis entró en el partido desde el banquillo, algo que sucedió en las dos últimas jornadas.
En los 25 minutos que jugó ante el Villarreal volvió a mostrar parte de ese repertorio que hace que, pese a su edad, sea un futbolista diferencial. Tras la lesión le costó encontrar su mejor nivel, pero como siempre será un futbolista decisivo en el último tramo competitivo en el que su equipo se juega volver, nueve años después, a disputar competiciones europeas.
Esta temporada acumula 1.579 minutos en Liga, más 58 en el torneo de Copa. Entre ambas competiciones, ha participado en 27 partidos. Los nueve goles que suma esta temporada igualan los que marcó en toda la pasada, con muchísimos minutos más de juego. El capitán ha sabido entender su nuevo rol y dentro y fuera del campo sigue siendo clave para Claudio Giráldez.
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