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Celta y Moriba no acaban de llegar a un acuerdo y la negociación llega al límite, ya que la opción de compra sobre el futbolista finaliza este domingo y, de no cerrarse el contrato del jugador, el Celta tendría que decir definitivamente adiós a la continuidad del hispano-guineano.
El club vigués no tiene ningún problema en abonar al Leipzig los seis millones acordados, el pasado verano, en la opción de compra y cuyo último día para tener esa preferencia es este domingo. Pero ello de nada sirve sin el acuerdo con el futbolista.
Moriba quiere seguir en Vigo y ha hecho un esfuerzo, rebajando su ficha, para que ello se produzca y el Celta está haciendo también un esfuerzo importante que, aun así, de momento no llega a esas cifras. El jugador tiene propuestas de varios clubes pero no se sentará con ninguno de ellos hasta este lunes, de no prosperar el acuerdo con el Celta.
De perder el conjunto céltico la opción de compra de la que dispone por el futbolista, es inviable el poder conseguir su continuidad más allá del domingo. A partir de ahí, el Leipzig pediría cantidades muy superiores ya que el mediocampista tiene mercado.
Moriba firmó esta temporada su mejor año desde su salida del Barcelona y después de pasar por Leipzig, Valencia y Getafe. Disputó 35 partidos oficiales, marcó un gol y dio 2 asistencias. Fue de menos a más, en su rendimiento, y Claudio Giráldez ha pedido su continuidad que también desean los aficionados célticos. Así lo pretenden también los dirigentes célticos pero tienen claro que no pueden hipotecarse y pagar unas cantidades muy por encima de su realidad económica.
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