LaLiga ha presentado esta semana una nueva batería de denuncias por cánticos ofensivos, intolerantes o incitadores al odio registrados durante las jornadas 36 y 37 de LALIGA EA SPORTS y la jornada 40 de LALIGA HYPERMOTION. En total, se han documentado incidentes en ocho encuentros, con referencias insultantes hacia clubes rivales, jugadores, árbitros e incluso instituciones del Estado.
Uno de los casos más graves se produjo en el Reale Arena durante el partido entre la Real Sociedad y el Celta de Vigo. En la grada de animación "Aitor Zabaleta", un grupo de aficionados entonó cánticos como “¡Puta España y puta selección!”, “¡Guaita muérete!” –dirigido al portero rival– y “¡Písalo, písalo!” cuando un jugador celeste estaba tendido en el césped. El club reaccionó con mensajes de condena en castellano y euskera desde megafonía y videomarcadores.
En Vallecas, durante el duelo entre el Rayo Vallecano y el Real Betis, un sector de la grada cantó “Arriba con la Goma-2…” mientras realizaban gestos de pistola con las manos, un cántico vinculado a la kale borroka. En el Sadar, los seguidores de Osasuna lanzaron reiteradas consignas ofensivas contra el Atlético de Madrid y sus futbolistas, con frases como “Atleti, mierda”, “todos los atléticos son unos hijos de puta” o “Giménez, hijo de puta”, además de un cántico en el que se aludía a la violencia contra el Racing de Santander y el grupo Ligallo.
También fue señalado el RCDE Stadium, donde durante el derbi catalán ante el FC Barcelona se entonó en al menos catorce ocasiones el cántico “Puta Barça” y se profirió el grito de “asesino” contra un jugador visitante. Además, se lanzaron botellas desde la grada de Gol El Prat tras los goles azulgranas. En otro partido del Barça, esta vez en el Estadio Olímpico Lluís Companys ante el Villarreal, se escucharon repetidamente cánticos como “Madrid, cabrón, saluda al campeón” y “Puta Real Madrid” desde la grada de Gol Nord.
Getafe tampoco quedó al margen. En el Coliseum, los grupos “Comandos 94” y “Cachorros Getafe” insultaron al eterno rival con “Puta Leganés” en dos momentos del partido ante el Athletic Club. Además, entonaron el cántico “Puto Vasco, el que no bote eh” y también gritaron “Písalo, písalo” hacia un jugador rojiblanco lesionado.
En Mestalla, durante el Valencia – Athletic, desde la grada Mario Alberto Kempes se cantó “Gil Manzano, hijo de puta” y se repitió el “Písalo” cuando un jugador visitante estaba en el suelo. Por último, en el Power Horse Stadium, durante el Almería – Racing, se registraron cánticos como “Puta Racing” y “Puta Santander”, además del grito “Eh, cabrón” durante un saque de puerta del portero rival.
Una triste lista
En todos los casos, LaLiga ha enviado los informes correspondientes al Comité de Competición de la RFEF y a la Comisión Antiviolencia, al tiempo que ha subrayado que estos cánticos constituyen infracciones sancionables según la normativa vigente. La patronal del fútbol profesional ha recordado que continúa su lucha contra la violencia y la intolerancia en los estadios, e insiste en la necesidad de disponer de más competencias para erradicar estas conductas. Además, destaca las múltiples medidas preventivas adoptadas por los clubes –desde controles de , cacheos y revisiones de simbología hasta campañas audiovisuales, presencia policial reforzada y sectorización de gradas conflictivas–, así como los mensajes de repulsa emitidos durante los encuentros.
Comentarios