En un ejercicio de insurrección en el seno de los Crushers, Charles Howell III, natural de Augusta, golfista irremediablemente v con sólo una victoria, el LIV de Mayakoba 2023, en los últimos siete años estuvo a punto de chafar otro domingo a Bryson DeChambeau, que por fin salió airoso tras tres desenlaces amargos en abril, uno de ellos en el Masters de la casa de aquél. Jon Rahm, mientras, acabó en séptima posicion.
Finalmente, fue el golfista científico, el de todas las varillas iguales, las bolas bañadas en aguas con sal para comprobar su perfección y demás experimentos el que salió airoso, después de una jornada algo ventosa en el Jack Nicklaus Golf Course, escenario del LIV Golf Corea, en la que Howell puso la pimienta con una remontada elogiable. (Resultados)
El estiloso estadounidense de 45 años, que había arrancado a cinco golpes de la cabeza, cargó en la ronda final en dos secuencias. Al inicio con tres birdies consecutivos nada más comenzar. Y luego con hierros certeros y un putter caliente con cinco aciertos más entre los hoyos 11 y 15 para igualar a Bryson en el liderato. Éste, con un solo bogey en el torneo, asistía a su lado asombrado del juego de su compañero de equipo. De su pelea salió la victoria, además, con holgura, de los Crushers en la clasificación por escuadras.
Pero Howell, un golfista que ya no está acostumbrado a pelear arriba cada semana, cometió un fallo en el 16. Cayó en el bunker de calle y ya no pudo coger el green de ese par 4 en dos golpes. El pique del tercero botó hacia la derecha y se dejó un putt lejano que no embocó. Fue la hendidura que necesitaba DeChambeau para escaparse hacia su tercera victoria en esta competición en la que no ganaba desde septiembre de 2023. Antes de afrontar el último par 5 -donde casi se va al lago- abrió la diferencia a dos con un birdie desde ocho metros.
Otro top 10 de Rahm
Rahm prolongó una fecha más su secuencia de top 10 en la Liga. Todos los torneos que ha terminado desde que se incorporó a la Liga, 19, los ha acabado entre los diez primeros. En Incheon repitió la escena, aunque muy alejado de sus deseos. En la última jornada cogió muchos greenes, pero ha perdido esa efectividad asombrosa que tenia de embocar putts de tres metros y medio para abajo. Cuatro birdies, tres de ellos en pares 5, y dos bogeys le llevaron a firmar 70 golpes.
Los otros españoles, los componentes de los fireballs, tuvieron un domingo dispar. Luis Masaveu bordó su mejor ronda de las 21 que ha jugado hasta ahora en el LIV Golf. Tiró 69 golpes, con un eagle desde 2,5 metros incluido, para acabar entre los 20 primeros. David Puig se hundió el último día con otros dos doble bogey -ha sumado cinco en Corea- y se fue a 74 a pesar de sus cinco birdies, y Sergio García se sacó la espina de una semana pobre con un 69 para finalizar.
Comentarios