Dreamland Gran Canaria: tres vueltas y media a la Tierra en una temporada

La vida en un avión. El Dreamland Gran Canaria acaba el año con 'jet lag' y el síndrome de la clase turista. Los claretianos han surcado los cielos de Europa, trazando una odisea épica que lo ha llevado a danzar sobre el parqué de 39 ciudades, cruzando las fronteras de 9 países y haciendo escala en 29 aeropuertos. Con 140.152 kilómetros recorridos, el equipo amarillo ha tejido una hazaña que equivale a tres vueltas y media al globo terráqueo o a un viaje que roza la mitad del camino entre la Tierra y la Luna. En sus 82 vuelos hacia 24 destinos, algunos tan lejanos como Lituania o Turquía, los jugadores han cargado no solo con sus maletas, sino con el peso de 63 partidos que han desafiado su resistencia física y mental.

Un aspecto que no ha pasado inadvertid para, Jaka Lakovic. El entrenador, el timonel de esta travesía, sacó a relucir los sellos acumulados en el pasaporte tras el último encuentro: "Mirando atrás, en los seis años que he estado como primer entrenador, esta ha sido la temporada más ardua, cargada de estrés y momentos que pusieron a prueba nuestra alma, pero el equipo ha respondido con grandeza". Los 140.000 kilómetros, comparados por Lakovic con un 40% del camino a la Luna, son mucho más que números. Son el testimonio de un grupo de jugadores que, entre turbulencias y horarios imposibles, encontraron la fuerza para dar la cara en la cancha.

El Dreamland Gran Canaria ha competido contra adversarios y adversidades: "Con 63 partidos y estas condiciones, estoy orgulloso del equipo, de su carácter y de su capacidad para sobreponerse a los momentos oscuros", afirmó Lakovic. Dejaba entrever que el verdadero triunfo radica en la resiliencia. Cada kilómetro recorrido, cada despegue y aterrizaje, ha sido un escalón en una temporada llena de complicaciones, pero también de momentos dulces. El 'Granca' se quedó a las puertas de levantar otro título europeo. Firmó un buen papel en la Copa del Rey, pero llegó sin gasolina a unos playoffs en los que fue apeado en cuartos. Pero, resultados a un lado, los datos del Granca hablan del costoso peaje que deben pagar los equipos canarios para competir en Europa.