El mercado de fichajes del Mundial de Clubes cierra este martes sin que ninguno de sus participantes haya hecho por fichar ya a Nico Williams. Pero eso no es sinónimo de tranquilidad. Bayern, Arsenal y Chelsea consideran la contratación del futbolista. El Athletic, que imaginaba un verano movido con el extremo internacional, pretende asegurar su presencia con una mejora de salario y de cláusula inmediata al tiempo de una prolongación del contrato que le une al club rojiblanco hasta 2027. Ese aumento de ficha está por debajo de los 10 millones de euros netos que deslizaron la pasada semana en redes sociales periodistas especializados en mercado de élite.
El futbolista, que cumplirá 23 años en un mes, se encuentra de vacaciones pero sabiendo que está en el centro del escenario. De todos los pretendientes el Bayern es el que más apuesta por su contratación. El contragolpe del Athletic está dirigido a que Nico niegue su salida por cuarta vez en poco tiempo. En enero de 2023 rechazó al Aston Villa, que quería llevárselo pagando los 50 millones que entonces tenía como claúsula de rescisión. Los villanos insistieron el verano de 2023 y el futbolista tampoco atendió el ofrecimiento. En 2024, a la conclusión de la Eurocopa, el Barcelona hizo todo por llevárselo. También dijo que no. La de los azulgrana no fue la única propuesta que recibió.
Nico explicó su decisión de continuar en Bilbao en la rueda de prensa que ofreció en San Mamés tras el partido ante el Atlético del pasado 31 de agosto. “Muchos equipos te quieren, he tenido muchas ofertas para hacer cosas que otro jugador hubiese hecho, pero estoy feliz aquí, Bilbao es mi casa. Mi corazón es rojiblanco”, dijo. En la misma comparecencia, sin embargo, sembró dudas cuando comentó que “tuve una charla con mis padres y mi hermano y decidimos que lo mejor era seguir un año más”. Ese plazo de un año competitivo ya ha concluido.
El Athletic entiende que las circunstancias que se dieron el pasado año para continuar están igual de vigentes. El futbolista tiene un sitio ideal para progresar, con el escaparate abierto de la Liga de Campeones y alineándose esta vez con su hermano Iñaki como primer capitán de la plantilla. Eso sí, en el club son igual de conscientes de que decir otra vez no a lo que recibe de fuera será complicado.
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