El Real Madrid logró uno de esos llamados triunfos de oficio al vencer al Granada (3-1) en el Alfredo Di Stéfano. El estreno goleador de Mäelle Lakrar y Eva Navarro, sumados al tanto de Signe Bruun, acabaron por sentenciar a un competitivo conjunto andaluz que no le perdió la cara al choque hasta el pitido final.
La primera parte estuvo más agitada que el fuerte viento que sopló en la capital durante todo el encuentro y que condicionó en ciertos momentos el desarrollo del duelo. Se puso por delante en el marcador el Real Madrid al cuarto de hora de acción gracias a un testarazo de Lakrar, que se estrenó como goleadora blanca tras un córner botado por Leupolz y tocado por Toletti en el primer palo. Pudo ahondar en la herida el conjunto blanco con dos acciones seguidas, un contragolpe que no supo finalizar Athenea y un mano a mano resuelto por Estévez ante Caicedo.
Después de la tormenta se rehizo el Granada, que logró minutos de calidad con el balón y sacó partido a una segunda jugada tras saque de esquina para lograr el empate. Mingueza asistió a Imade que, mientras las rivales pedían fuera de juego -no lo era- definió por bajo ante Misa logrando su décimo tanto de la temporada.
También hubo en la primera parte lugar para la polémica. Se pidió penalti sobre Athenea, posiblemente trabada por Alba en una internada por banda, y sobre Requena, que se fue al suelo tras un forcejeo con Sheila en el interior del área. La trencilla, Zulema González, no pitó uno ni otro.
El paso por vestuarios hizo que el Real Madrid saliera con energías renovadas. Bruun volvió a poner por delante a las blancas al recoger un rechace de Estévez a centro de Caicedo, que revolucionó el encuentro hasta que abandonó el verde. Pudo sentenciar el choque el conjunto local con ocasiones clarísimas. Estévez sacó dos goles cantados a disparos de Linda y Tere. Unas manos de Leles dentro del área fueron sancionadas con penalti, pero Tere estrelló el lanzamiento desde los once metros en el travesaño. Poco después sería Alba la que se topara con el larguero con una volea con parábola desde el interior del área.
El Granada lo intentó hasta el final y rondó el empate en una contra en la que Mingueza disparó a bocajarro y obligó a Misa a firmar el paradón del choque. Jugada clave, visto el devenir del choque. El Real Madrid sentenciaría el duelo en el tiempo de añadido después de que Eva Navarro finiquitara la penúltima contra. Las blancas suman y siguen, se afianzan en la segunda posición y marcan distancias respecto a sus perseguidores.
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