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España sabe lo que es ganar a Dinamarca en su casa. Lo hizo en octubre de 2007 y lo logró con Luis Aragonés en el banquillo y en medio de una de esas tormentas, que, por fortuna, han dejado de ser habituales en el combinado nacional. Aquel partido en Aarhus fue el inicio de muchas cosas. Algunos hablan del arranque de la España campeona. Cierto. Otros se inclinan, sin embargo, por el de un modelo de juego que vio la luz con futbolistas que meses después conquistaron Europa primero y el mundo después. Era la España del toque, de la superioridad, con la combinación, moviendo la pelota como nadie era capaz de hacer en el planeta fútbol.
El recuerdo es imborrable y esa España necesitaba dejar atrás aquello de la furia. Los futbolistas que había en ese momento invitaban más a pensar en la calidad y en el toque, que en aquello de la pelea, la garra y la entrega. No quiere decir que no la tuvieran, pero lo suyo era el buen fútbol. Y se demostró.
Un minuto y quince segundos de magia
Una sanción obligó a jugar lejos de Copenhague. España llegaba con el agua al cuello y tenía que hacer algo importante ante Dinamarca y vaya si lo hizo. No solo ganó con bajas importantes, sino que lo hizo asombrando al mundo, con un gol de esos que se estudian en las escuelas de fútbol, de lo que es la posesión del balón y culminar una jugada de la mejor manera posible. Un minuto y 15 segundos que se transformaron en un gol decisivo de Sergio Ramos, para lo que se tocó el balón en 65 ocasiones, con 28 pases de por medio.
Xavi Hernández, Iniesta y Cesc Fábregas dieron forma a ese centro del campo que empezó a cautivar a todo el mundo. Fueron los actores principales, pero no los únicos. MARCA ha querido pulsar el recuerdo de ese partido, que a la larga resultó decisivo. En la que el encuentro entre Dinamarca hubo hasta triple presencia del Espanyol con Luis García, Riera y Tamudo. Aparecieron cuando más los necesitaba el equipo, para después quedarse fuera de la Eurocopa por decisión técnica.
El partido que cambio la dinámica de España
Cesc, ahora entrenador del Como italiano, habla sobre lo que cambió en aquel partido para que se empezase a ver a España como equipo con opciones de ganar títulos: "De las primeras veces que puso a Xavi, Iniesta y a mi. Había alguna baja, creo que Villa y Torres. Había mucho dinamismo, nos empezamos a encontrar, a jugar bien, mucho toque, mucha paciencia. Jugó Tamudo que lo hizo muy bien, además marcó. Estaba Albelda que nos protegía un poquito. Llegábamos con mucha claridad, muy juntitos. Siempre se dice que ese fue el partido en que todos y Luis nos empezamos a creer que con ese estilo se podía hacer bien, competir, ganar… fue un partido increíble y con sensaciones buenísimas".
Llegamos exigidos y con bajas importantes como la de Villa y en los días previos la de Fernando Torres
Luis García, ahora en el cuerpo técnico de la selección de Qatar, estuvo presente en aquel partido y recuerda para este periódico lo que significó para él. “Tengo un gran recuerdo de ese buen partido. Lo primero es que llegamos bastante exigidos. El partido era prácticamente decisivo para poder clasificarte a la Eurocopa, que luego se ganó. Llegamos con bajas importantes como la de Villa y en los días previos la de Fernando Torres. Para el Espanyol, además, fue una convocatoria importante porque íbamos tres jugadores del club como Tamudo, Riera y yo, que terminamos jugando los últimos veinte minutos juntos. Si ganamos, la clasificación estaba prácticamente hecha. Dinamarca era un grandísimo rival, con grandes jugadores y nuestras bajas elevaban el grado de dificultad”.
Da con la clave de lo que sucedió. “Teníamos un un buen grupo, que además confiaba plenamente en el mister, en Luis. Recuerdo el primer gol, de Tamudo, un golazo. Luego llegó el segundo, el inicio del tiki taka. Gol que llegó tras otra jugada colectiva extraordinaria, de las mejores que recuerdo. La picadita de Ramos… y después la sentencia de Riera. Fue el inicio de la gran España, que jugaba muy bien al fútbol, con unos peloteros tremendos en el centro del campo. Por el momento del nacimiento de una gran generación y de una época de oro. Todos nos sentimos orgullosos de aquello por el convencimiento y, sobre todo, por el buen hacer del míster”.
Estreno de Raúl Albiol
Raúl Albiol fue otro de los que participó en aquel partido. Si cabe, para él fue hasta más especial, porque se estrenó como internacional ante Dinamarca. “Imagina, era mi primera convocatoria con España y encima se lesionó Puyol. Me acuerdo de todo. Me estrené como titular. Solo nos valía ganar para estar en la Eurocopa y contra una Dinamarca, que también se jugaba el pase. Llegábamos con muchas e importantes bajas. Puyol, Villa, Torres… debuté yo, jugó Tamudo, que tampoco era muy habitual, también Riera”.
Era un partido lleno de tensión. Mejor estreno, imposible. Dimos inicio a un momento muy importante de la selección
Para el central fue el inicio de algo grande. “Era un partido lleno de tensión. Mejor estreno, imposible. Dimos inicio a un momento muy importante de la selección”. Joaquín recuerda lo que ya apuntaba la selección. “España venía haciendo muy buen fútbol. Se veía más claro que se podían conseguir cosas”. Para Cesc fue el inicio de algo grande. “Sabíamos jugar y bien al fútbol. Era cuestión de tiempo. Faltaba explotar y a partir de ese partido todo cambió".
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