Al-Attiyah cambia el plan: "No queda otra opción: atacar"

A Nasser Al-Attiyah le ha cambiado de golpe el guion del Dakar 2025. Si hace unos días, en conversación con los medios españoles destacados en Arabia Saudí, confesaba que su plan pasaba por un único objetivo: la victoria final, para lo cual estaba incluso a sacriifcar los triunfos de etapa. Por entonces ya había visto caer a Carlos Sainz y renquear a Sebastien Loeb, pero apenas dos días después el escenario es otro. 

Hoy ha sido él el que ha sufrido un mordisco del Dakar. En forma, además, de una avería mecánica inédita en Dacia: la rotura de la rótula del brazo de suspensión de una de las ruedas traseras. Un problema más a los que ya han experimentado en el Dakar con la dirección y la refrigeración del motor V6 biturbo de origen Nissan. 

En modo ataque

El caso es que la pérdida de 33 minutos (que podrían haber sido más) ahora obligará a Al-Attiyah a pasar a la ofensiva: "Mañana solo tenemos una opción: atacar", aseguraba esta tarde desde el campamento maratón. Para ello, primero tendrán que dejar el coche en perfecto estado (aunque probablemente llegó bien a tenor del alto ritmo que pudo imponer después de la reparación en plena etapa).

"Nos paramos una vez por un pinchazo y otro por el brazo [de la suspensión] derecho. Llegó Cristina, lo fijamos e intentamos acabar. No fue fácil pero... qué le vamos a hacer. Veremos qué tal va mañana", explicaba un Al-Attiyah al que los problemas no le sorprenden (han estado a la orden del día tanto en Marruecos como en el Dakar). 

"Es un coche nuevo. Aparecerán problemas, pero lo hemos solucionado. No nos preocupa mañana, el coche está bien y tenemos la garantía de quue hemos dejado el coche listo", añadía, también con un ojo puesto en lo que vendrá después: la segunda semana de carrera: 

"Intentaremos manejarla lo mejor posible. Será un terreno diferente al de esta primera semana, pero el Dakar es el Dakar... siempre sorprende".