Queda un año para que arranque el Mundial 2026 y el nerviosismo de las diferentes aficiones crece. Lo hace, sobre todo, porque hay muchos extranjeros que se muestran reacios a viajar a Estados Unidos por culpa de la problemática derivada en los últimos meses con los visados, controles fronterizos y la fuerte violencia social que está viviendo el país.
Queremos que vengan, se diviertan y vean los partidos. Pero cuando esto termine, tendrán que irse
Una situación que ha llevado a la istración de Donald Trump a dedicarle unas palabras a estas personas que estuvieran pensando viajar al país norteamericano para ver la Copa del Mundo de la FIFA 2026 en directo: "Sé que tendremos visitantes, probablemente de cerca de 100 países. Queremos que vengan, se diviertan y vean los partidos. Pero cuando esto termine, tendrán que irse", decía el vicepresidente de los Estados Unidos, J.D. Vance, a principios de mayo.
La respuesta de las 16 ciudades sede del Mundial
Unas palabras que no han quedado en el olvido para todas las ciudades que serán anfitrionas en el próximo Mundial 2026, de las que once de ellas se encuentran en suelo estadounidense. De hecho, este lunes han sido los presidentes de los comités de estas once ciudades las que decidieron informar a la prensa sobre la logística (transporte urbano, al estadio y zonas para aficionados), así como sobre el general a Estados Unidos para la competición.
"Nuestro papel como ciudades anfitrionas es asegurarnos de dar la bienvenida a todos los que quieran venir a nuestras ciudades y hacerlos sentir bienvenidos... Habrá cuestiones geopolíticas, que aún desconocemos, que afectarán el torneo el próximo año", afirmaba Meg Kane, presidenta de dicho comité organizadoor de Filadelfia. Una declaración a la que añadía: "Las ciudades anfitrionas no necesariamente jugamos un papel en términos de decisiones políticas, pero podemos decir que este gobierno -y como tal estamos siguiendo ciertos temas muy de cerca- realmente apoya la Copa del Mundo".
Y no han sido las únicas. Ya que la ciudad de Nueva York y la vecina Nueva Jersey también han dado un poco de tranquilidad a los asistentes: "Damos la bienvenida a todos los que puedan venir", dijo el presidente del comité organizador local, Alex Lasry. Esperan ver a millones de aficionados dentro y fuera de los estadios.
Los problemas para entrar a Estados Unidos
Cabe recordar que en 2017, cuando Estados Unidos, Canadá y México ganaron de forma conjunta la candidatura para albergar el Mundial, las relaciones entre los tres países eran cordiales, también con Donald Trump en la Casa Blanca. Una sensación que parece que se ha desvanecido durante los últimos meses. Una situación que unida a los crecientes problemas de entrada de algunos visitantes de Francia, Alemania, Australia y Canadá, rechazados por EEUU o sometidos a prolongados interrogatorios, han terminado por hacer desistir a varios interesados en ir al Mundial.
Por ahora, la istración Trump ha prohibido la entrada a ciudadanos de doce países desde el lunes e impuesto restricciones a otros siete. Y ahora mismo la ciudad de Los Ángeles está sufriendo tres días de enfrentamientos en las calles, a veces violentos, contra la política migratoria de Donald Trump. Un nuevo giro que intentan los principales responsables de las sedes, para dar seguridad y calma a los posibles visitantes el próximo verano de 2026.
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